
Otro crimen atroz de Israel
Imagen de cabecera: Mapa de Líbano con localización de las detonaciones. Fuente: BBC
El pueblo de Líbano se recupera tras sufrir los ataques mortales, con la explosión de buscas simultáneamente por todo el país el martes, posteriormente se detonaron walkie talkies el miércoles de la misma forma.
Mientras tanto, el miércoles el Ministro de Guerra Israelí dijo a las tropas israelíes “Estamos al inicio de una nueva fase de la guerra – ésta requiere coraje, determinación y perseverancia”. “Los resultados son muy impresionantes”, admitió, admitiendo la responsabilidad de Israel sobre el crimen.
La primera ronda de explosiones empezó en la capital de Líbano, en Beirut, y varias otras áreas del país a las 15:30 de la hora local del mares. Salió humo de los bolsillos de la gente antes de una pequeña explosión que sonó como si fuesen petardos o disparos. Según el New York Times, los buscas recibieron un mensaje que probablemente hizo explotar los dispositivos. Las explosiones continuaron alrededor de una hora tras la explosión inicial.
Escenas similares sucedieron a lo largo del país en otra ronda de explosiones el miércoles, a las 17:00 de la hora local. Informes sugieren que fueron walkie-talkies lo que explotó. Al menos una explosión se dio cerca de un funeral que se realizaba en Beirut por algunas de las víctimas del ataque del martes, creando pánico entre aquellos que estaban en la procesión.
Al menos 37 personas, incluyendo dos niños, fueron asesinados y miles fueron heridos, muchos de forma grave, según el ministerio de salud de Líbano. El carnicero de Israel de nuevo muestra que deliberadamente, ataque civiles, esparciendo el terror blanco.
Tales trampas están fuera de lo permitido bajo el Protocolo sobre Minas, Trampas y otros Dispositivos en el “Protocolo Enmendado II” de la Convención sobre Ciertas Armas Convencionales, de la cuál Israel es miembro. Artículo 7, párrafo 2 del Protocolo Enmendado II, prohíbe el uso de “trampas y otros dispositivos que tengan formas de objetos portables no hirientes los cuales son específicamente diseñados y construidos para contener material explosivo”.
Además, el daño causado a los civiles o a la propiedad civil debe ser proporcional y no “excesiva en relación a lo concreto y a a la ventaja militar directa anticipada” por el ataque sobre el objetivo militar. Artículo 52 del Protocolo Adicional I de las Convenciones de Génova prevé una definición ampliamente aceptada del objetivo militar: “En lo que respecta a los bienes, los objetivos militares se limitan a aquellos que por su naturaleza, ubicación, finalidad o uso contribuyan eficazmente a la acción militar y cuya destrucción, captura o neutralización total o parcial, en las circunstancias imperantes en ese momento, ofrece una clara ventaja militar.”
Conforme a ello, las acciones llevadas a cabo por Israel constituye un crimen de guerra más, a añadir a la casi interminable lista.
Mientras tanto, el imperialismo yanqui ha apoyado, una vez más, al Estado de Israel. Medios burgueses yanquis informó que el Ministro de Defensa Israelí, Yoav Gallant, llamó al Secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin el jueves para informar que se haría una operación militar. Esta llamada fue una de las cuatro que tuvieron juntos. Entonces, es obvio que el imperialismo yanqui estaba al tanto de lo que pasaba y no hizo nada para evitarlo. Incluso peor: tras estos ataques terroristas que tuvieron lugar en Líbano, Lloyd Austin expresó “el apoyo inquebrantable a Israel”, y “enfatizó el apoyo de EE.UU. para derrotar a adversarios regionales”.
La compañía taiwanesa Gold Apollo dijo que no había autorizado el uso de su marca comercial en los buscas que explotaron el martes. Por tanto, los dispositivos fueron realmente manufacturados y vendidos por Bac Consulting KFT – una compañía con base en Budapest, Hungría. Noticias húngaras contradictorias asegurar que Telex informó el miércoles que la compañía con base en Sofía llamada Norta Global Ltd. estuvo tras el trato para vender los buscas y que una firma húngara, conectada con la transacción, no manufacturó o vendió los buscas. La Agencia Estatal Búlgara de Seguridad Nacional negó estos reportes.
Dejando las fuentes de lado, como New York Times, plausiblemente informó que las agencias de Israel están construyendo estas compañías falsas desde hace años, las cuales muestran que esta masacre masiva no puede ser explicada por los desarrollos actuales, sino que fue planeada hace tiempo. Las trazas también llevan directamente a la Unión Europea, confirmando la culpabilidad de los gobiernos de los países imperialistas de la Unión Europea, principalmente de Alemania y Francia, quienes permiten y apoyan estas atrocidades, y su complicidad en el genocidio actual. Esto revela la hipocresía de Josep Borrell.
El reciente cruel asesinato de civiles empezó justo un día después del aniversario de la Masacre de Sabra y Shatila: en 1982, siguiendo los días de asedio y bombardeos, la Falange israelí-libanesa lanzó un ataque, matando al menos a 3.000 refugiados palestinos y civiles libaneses. Bajo el mando del infame Ariel Sharon, las IDF iluminaron el cielo de la noche con estelas mientras los combatientes de la Falange entraban en los campos a través de las líneas militares israelíes, asesinando sin piedad a cualquiera en su paso, incluyendo ancianos, mujeres y niños. También atacaron el hospital del campamento, donde asesinaron enfermeras, doctores y pacientes quienes habían buscado refugio de la masacre.