CHILE: EE.UU. inicia nueva intervención militar en América Latina.
A continuación compartimos una nota de la Página de Facebook del Periódico El Pueblo de Chile.
El 14 de agosto, el imperialismo yanqui desplegó tropas navales y aéreas en el Mar Caribe Meridional, bajo la gastada excusa de la “guerra contra las drogas”.
El objetivo real no es el narcotráfico, sino el cerco militar y político contra Venezuela y Colombia, sumando nuevas sanciones y amenazas. La Casa Blanca anunció el envío de buques y aviones de guerra, subió la recompensa por Nicolás Maduro a 50 millones de dólares y ordenó al FBI ampliar listas de “terrorismo” que criminalizan a movimientos populares.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, declaró que colaborará “sin sumisión ni invasión”, pero en los hechos ya deportó prisioneros a EE.UU. y mostró la misma capitulación ante el imperialismo que históricamente han tenido los gobiernos latinoamericanos.
La llamada “guerra Antinarcos” es una vieja farsa: EE.UU. es el mayor consumidor de drogas del mundo, mientras su sistema financiero lava miles de millones del narcotráfico. Como en Panamá (1989) y el Plan Colombia (2000), el objetivo verdadero es reprimir al pueblo, controlar recursos estratégicos y afianzar bases militares yanquis.
Documentos y reportajes del NYT confirman que Trump ya había presionado al Comando Sur para autorizar misiones clandestinas de Navy SEALs y Boinas Verdes en Venezuela, Colombia y Bolivia. Hoy, el guion se repite con nuevas caras y el mismo fin: aplicar la doctrina Monroe (“América para los americanos”) contra la creciente influencia China y Rusa en la región.
El Comando Sur amplía operaciones y acuerdos con gobiernos sumisos, mientras refuerza el bloqueo y las amenazas contra Venezuela, país con grandes reservas de petróleo, oro y coltán. Frente a esto, el presidente Nicolás Maduro anunció la movilización de 4,5 millones de milicianos populares: “Fusiles y misiles para la fuerza campesina y obrera, para defender la patria, la soberanía y la paz de Venezuela”.
La realidad es clara: la “guerra contra las drogas” es solo un disfraz. El verdadero motor es el control imperialista sobre América Latina.
¡Yanquis Go Home!
Por Comisión por la conformación del FAI – Chile
