Colombia: La lucha campesina por el predio en La Sorna

A continuación compartimos un resumen de un artículo de Nueva Democracia.

El predio La Sonora, de más de 1.000 hectáreas cerca de Pailitas, Cesar, está siendo recuperado por más de 100 familias campesinas que por tercera vez buscan conseguir un pedazo de tierra.

Este terreno tiene un oscuro pasado vinculado al paramilitarismo y convertido en cementerio. La Sonora fue un centro de entrenamiento para tropas paramilitares bajo el mando de Aramis Machado Ortiz, conocido como “Cabo Machado”, quien entrenó a paramilitares en el Bloque Catatumbo y fue cómplice de Jorge Iván Laverde, implicado en desapariciones forzadas.

La quebrada de agua “La Floresta” tiene actualmente un estado preocupante debido a la extracción de material de arrastre, que ha dañado su ecosistema y contamina la cuenca hídrica. Esta situación afecta a las siete comunidades en la parte baja de la quebrada, generando inquietud entre los recuperadores y la población en general.

Quebrada La Floresta. Fuente: Nueva Democracia

Los campesinos que están llevando a cabo la recuperación de la tierra en La Sonora provienen de diversas comunidades, muchas de ellas afectadas por la violencia histórica contra el campesinado en Colombia. Este grupo incluye tanto campesinos locales como desplazados del Catatumbo y áreas cercanas. La historia de estas familias está entrelazada con la lucha por la tierra, ya que muchos poblados cercanos se formaron a partir de antiguas recuperaciones. En La Sonora, se encuentran descendientes de antiguos recuperadores y participantes de movimientos como el paro cívico del nororiente colombiano de 1987.

La participación de mujeres es notable, quienes, junto a los hombres, realizan tareas diarias como la cocina, siembra y vigilancia. Estas mujeres luchan por sus hijos y están decididas a defenderla. Además, la juventud está activamente involucrada en la lucha, desafiando la idea de que “ya no creen en el campo”. Su energía y compromiso demuestran que están dispuestos a luchar por la tierra si creen en la posibilidad de éxito.

Los recuperadores argumentan que el predio tiene tierra que no se trabaja, lo que significa que su actual propietario se ha apropiado ilegalmente de tierras que deberían destinarse al campesinado. Sin embargo, las leyes y el sistema estatal favorecen a estos propietarios ilegítimos en lugar de a los campesinos.

Los campesinos de La Sonora enfrentan una amenaza de desalojo que fue suspendida indefinidamente gracias a su lucha por legitimar sus acciones ante la comunidad. Sin embargo, el supuesto propietario del predio sigue reclamando derechos, y el aparato estatal protege sus intereses. Los campesinos han denunciado a funcionarios locales y a un abogado del antiguo propietario por difundir mentiras y amenazar a la comunidad. También acusan a representantes de volqueteros de intentar ingresar al predio con paramilitares para explotar la quebrada sin licencias ambientales.

A pesar de estas amenazas, la moral y la confianza de los recuperadores se mantienen altas. Se inspiran en procesos exitosos de recuperación de tierras, como el de la Oficina, donde campesinos resistieron un intento de desalojo por parte del ESMAD. Actualmente, los recuperadores de La Sonora están organizándose para enfrentar futuros desafíos y llaman a organizaciones campesinas y sociales a solidarizarse con su lucha.

La recuperación de La Sonora se enmarca en un contexto más amplio de tomas de tierras en el Cesar, lo que ha generado reacciones de los terratenientes, quienes advierten sobre las consecuencias legales de estas acciones. Los campesinos buscan visibilizar su lucha como una acción legítima y necesaria del movimiento popular por la tierra.

Previous post Brazil: CEBRASPO – DOWN WITH STATE TERRORISM
Next post France: Immense success of the demonstration for the release of Georges Abdallah in Paris!